Final de Juvenil - Náutico logró el campeonato

Náutico Sportivo Avellaneda le ganó 4 a 3 a Unión Central y logró el título en categoría Juvenil, en un partido de trámite intenso, con muchas llegadas y demasiado discutido.

El partido arrancó con todo, ambos rivales comenzaron palo y palo, se lo erró la carpita, y en la contra Náutico ya estaba arriba 1 a 0 con gol de Ignacio Zorzón quien por esforzarse en pelear un pelota tuvo su premio cuando su débil remate se le escurrió entre las piernas al arquero.

Pero en la siguiente derribaron a un jugador de la carpita adentro del área, el penal lo pateó Martín Schiavo para empatar el marcador. Pero en ese terrible ida y vuelta que se había convertido el partido, en una contra bien ejecutada que termina en descarga hacia la derecha Leandro Bidelozzi batió por abajo al arquero rival y puso el 2 a 1 para el equipo de la costa.

Unión Central que iba e iba, generaba mucho pero fallaba todo no podía empatar un partido en donde estaba haciendo todo el gasto, y podía caer en otra contra de Náutico, que más de una vez también estuvo cerca de convertir. Hasta que en un ataque profundo Lisandro Aranda pudo empatar el partido para la carpita y poner justicia en el marcador.

Pero se relajó con este empate, y sintió el esfuerzo que había hecho en lo que se llevaba jugado, por eso esos minuetos fueron de Náutico que tuvo el tercero en varias ocasiones hasta que a los 10 minutos en un rebote de un córner, le cayó la pelota servida a Ignacio Zorzón que a pocos metros del arcó fusiló al arquero para establecer el 3 a 2.

Allí volvió a despertar Unión Central y se volvió a venir con todo, metiendo a Náutico contra el arco empujado por el público que los alentaba continuamente. Pero no lograba meter las situaciones que fue creando, casi siempre tapadas por el arquero rival que tuvo una buena actuación.

Sobre los 17 minutos cuando los embates de la carpita habían cesado, llegó el empate a través de Martín Schiavo, jugador clave en esa primera parte. Pero el mismo Schiavo se hizo expulsar tontamente al tocar una pelota con la mano al intentar cortar una salida del arquero rival, y como estaba amonestado por una protesta anterior debió dejar a su equipo sin su figura en la primera parte.

Para el segundo tiempo lo más esperado era que ambos equipos bajasen el ritmo, producto del intenso esfuerzo de la primera etapa y por otro lado, porque con el reloj en contra la segunda etapa ya no era para arriesgar, y se vio claramente dos equipos más especulativos.

Las llegadas ya no eran tan en bloque, sino más bien con acciones individuales, o remates de larga distancia, y alguna contra firtuita que se producía por algún rebote inesperado. Hubo así y todo muchas llegadas, pero ambos arqueros estuvieron a la altura de la final y contuvieron todo lo que le tiraron.

Sobre lo 13 minutos ante una falta de atrás de mitad de cancha, sobre el círculo central, Ezequiel Rodríguez el potente ala de Náutico sacó un tremendo remate que batió el arco de Unión Central para poner el 4 a 3, que si no llegaba con este tremendo gol parecía que no llegaría nunca.

Y nuevamente el partido tuvo un ritmo vertiginoso, porque la carpita salió a buscar con todo el empate que necesitaba para llegar al alargue, dejando puntos flojos atrás que Náutico en varios contras falló incluso en goles casi hechos.

Unión Central intentó de todas formas empatarlo, pero estaba sin fuerzas y su jugador clave a la hora de definir se había ido de la cancha expulsado en la primera etapa, por lo que le equipo carecia de contundencia.

Lo ganó Náutico, lo pudo haber ganado Unión Central que mostró mucha ambición en llevarse el campeonato, pero como ya sabemos todos, las finales no se merecen se ganan, hoy se dio al pie de la letra.