Primera División - Velocidad y Resistencia el otro finalista

VIDEO DEL PARTIDO

Velocidad y Resistencia es el otro finalista del torneo de Primera División, al derrotar a Central Córdoba por 3 a 1 en el partido, lo que llevo todo a tiempo suplementario, donde el rayo volvió a vencer al charrúa por 4 a 0. El partido se jugó con gran clima debido a la gran cantidad de gente que se acercó a la cancha a presenciar el partido.

Un partido que arrancó muy cerrado desde los dos lados, Central Córdoba esperando clásico a su estilo, Velocidad sin querer desesperarse por atacar sabiendo que solo necesitaba un gol podía llegar en cualquier momento, en ese esquema transcurrió gran parte del primer tiempo, donde Velocidad manejó la pelota a su antojo pero sin desesperarse por atacar evitando así las contras rivales que casi no existieron.

El rayo falló 3 claras, con dos remates de Rodrigo Texeira (uno de ellos dio en el palo) y una jugada entre Gustavo Erb y Luciano Almada sólos frente al arquero donde el primero falló el pase.

El charrúa tuvo algún acercamiento, donde la más clara la tuvo su goleador Emanuel Serrani que ganó la posición y su disparo desde el lateral se fue por encima del travesaño.

Hasta que faltaban algunos minutos para el cierre, luego de una habilitación con el pie del arquero de Velocidad a Gustavo Erb, este entrando desde la derecha en diagonal remató un fuerte disparó de zurdo que se clavó cruzado en el palo derecho del arquero.

Para poner el 1 a 0 con el que se cerró el primer tiempo. Se sabía que con la ventaja, Velocidad iba a buscar más control de pelota, esperando la salida de un rival que dependía mucho del físico de sus jugadores y al que le convenía que todo se defina rápido sin llegar al suplementario.

Y a pesar de que el rayo salió a hacer ese juego, al minuto de juego tras un forcejeo entre Emanuel Serrani y Mariano Majul, el hombre de Central Córdoba ganó la disputa y desde el sector derecho sin mediar movimiento alguno, sacó un gran remate que luego de pegar en el palo izquierda del arquero Santiago Matich ingresó en el arco decretando el 1 a 1.

Y con ese partido, todo empezaba de cero. Central Córdoba hasta allí metido en la Final ,el rayo quedándose sin nada. Velocidad siguió buscando espacios para atacar claramente y no llegar con remates de lejos que era lo que buscaba la defensa charrúa. Pero eso le costaba demasiada porque no podía agredir al rival.

Aunque Central Córdoba tampoco ya salía de contra para evitar mayor desgaste en sus hombres. Hasta que promediando este segundo tiempo, y viendo que el local tuvo por necesidad que hacer algunos cambios que Velocidad sacó a relucir algunas de sus variantes tácticas.

Pelota en la mitad de la cancha del rayo, Gonzalo Pedemonte, hace una seña a sus compañeros, para que liberen el sector derecho, espacio por donde se iba atacar, y allí le jugó la personal a su defensor, lo pasó y saliendo del círculo medio, sacó un terrible remate que se clavó en el ángulo izquierdo del arquero Alejandro Bruno, gol de otro partido con el que el rayo conseguía la ventaja necesaria de 2 a 1 para llegar al suplementario.

Central Córdoba prefirió guardarse en lugar de salir a buscar el empate, temía que por adelantarse en la cancha, y con esto sufrir la contra del rival con jugadores más descansados por la constante rotación que hizo el técnico visitante debido a su numeroso plantel.

Y por el bajo score del marcador (solo 3 goles hasta allí), que no solo aseguraba el alargue, sino que en caso de que el suplementario saliera empatado, llegarían los penales. La decisión de esperar del charrúa pareció acertada. En la ida el marcador favoreció Córdoba por un gol de ventaja.

El entrenado y dirigido por Fabián Basile estaba tranquilo y mantuvo en el banco a sus hombres claves para que tengan el descanso necesario, en tanto que Velocidad que no tenía nada asegurado porque un gol del local lo dejaba nuevamente afuera mantuvo siempre en cancha una postura más agresiva, no para tener la ventaja de dos goles en el alargue sino para asegurarse con un gol más estar en el mismo.

Y el gol del rayo llegó, a la salida de un córner que no trajo mayor peligro, habilitación de cabeza a Gustavo Almada, el capitán de Velocidad, quien casi sin ángulo desde el sector izquierdo, sacó una gran volea de derecha para meterse en el 1º palo del arco de Central Córdoba, era el 3 a 1, con el que las cosas cambiaban, porque obligaba al charrúa, en caso de alargue a tener que salir a ganar el mismo, porque ahora el rayo tenía la ventaja.

Central Córdoba metió en cancha a sus jugadores claves para buscar la remontada antes del cierre, pero un inteligente Velocidad y Resistencia, con buena rotación de pelota, una buena salida de presión y jugadores muy rápidos a la hora del pase, evitó que el rival se haga de situaciones, y en alguna contra hasta pudo ampliar la ventaja.

En ese esquema se fue el partido, ahora era el tiempo del alargue. Tiempo suplementario que el charrúa debía ganar en un partido que tan sólo había podido marcar un gol y donde tuvo pocas llegadas al arco rival.

Así se inicio el alargue, Velocidad metiendo continuidad táctica de lo que había siendo el cierre del partido, Central Córdoba ahora presionando la salida del rayo.

Nada pasaba hasta que promediando la etapa, hubo falta a un jugador del rayo, quien ejecutó una jugada táctica, la pelota tras el remate fue contenida por Alejandro Bruno, pero el rebote quedó bollando, Gonzalo Pedemonte la llegó a tocar, y cuando la pelota luego de pegar en el palo y parecer meterse, Márquez el hombre charrúa en el esfuerzo por querer sacarla terminó asegurando el tanto. La suerte había cambiado de manos.

Ese gol pareció sentenciar todo, ahora el charrúa debía meter dos goles para pasar, y eso animicamente terminó de desgastar a un plantel que fisicamente ya estaba agotado. Saque de meta, el arquero charrúa en su intento de meter un saque directo al pivot, termina entregando la pelota en la mitad a Gonzalo Pedemonte, quien se fue solo y fusiló al arquero charrúa para poner el 2 a 0 con el que se cerró el primer tiempo del alargue.

En la segunda parte, Velocidad dirigido por Luciano D'Elia, rotó a todo su plantel nuevamente, lo cual le trajó aire fresco pero algunos desconciertos en la marca, hasta que se acomodaron en la cancha, esto con lo último que quedaba el charrúa lo aprovechó para atacar a los de calle Urquiza pero allí apareció la figura del arquero del rayo, Santiago Matich que una y otra vez ahogó el grito de gol.

Y en una contra donde se fueron dos contra el arquero Luciano Almada sentenció todo, poniendo el tercer gol. Otra contra más y Guido Pederzoli puso el 4 a 0 final con el que terminó el partido.

Dos rivales que dieron todo, pero Velocidad y Resistencia pasó a la Final porque se mostró más entero físicamente y en base a su rotación de hombres fue desgastando a un rival que esta vez no tuvo la eficiencia para convertir de otros partidos contra el mismo rival.